Ya el secreto salió a la luz
como es forzoso que suceda,
maduro el chisme que divierte
al amigo que tienes cerca;
sobre manteles y en la plaza
las lenguas se van de la lengua;
que las apariencias engañan
y nunca hay humo sin hoguera.
Detrás del cuerpo en el estanque,
detrás del fantasma en los hoyos,
detrás de la dama que baila
y el hombre que bebe a lo loco,
bajo la mueca de cansancio,
la migraña y los ojos rojos
hay historias que no se cuentan,
no todo lo que brilla es oro.
Para la clara voz que canta
desde la tapia del convento,
el perfume de los arbustos,
los cuadros con escenas de recreo,
el croquet en verano,
el saludo, la tos, el beso,
hay siempre una clave privada,
hay siempre un secreto perverso.
Trad. J.D. / el original, aquí.
¶
Hace unos años el responsable de una
revista cultural madrileña me llamó para solicitarme la traducción de un
célebre poema de Auden. El poema, en realidad una canción, se titula «At last
the secret is out» y forma parte, junto con «Funeral Blues» y otras piezas, de
las «Twelve Songs» («Doce canciones») que Auden compuso en 1936. Entre nosotros el poema es muy
conocido porque Jaime Gil de Biedma lo tradujo al español para la edición
definitiva de Las personas del verbo.
Eso fue justamente lo que razoné al atender la llamada: ya existe la versión de
Gil de Biedma, ¿por qué no recurrís a ella? Mi interlocutor hizo como que no me
había oído. Quizá pensó en problemas de derechos, en agentes y herederos
espinosos. El caso es que el encargo se mantuvo.
Cuando alguien te muestra su confianza
hasta ese punto lo mejor es no hacerse de rogar y proceder con rapidez. Pero
antes releí la traducción de Gil de Biedma y la comparé con el original. Me
llevé una sorpresa. Bien es verdad que el autor de Moralidades dice que la suya es una versión «en romance»: tres
estrofas de ocho octosílabos cada una, con rima asonante en los versos pares.
Pero es más que eso, pues lo que hace Gil de Biedma es traducir culturalmente la escena del poema de Auden,
ese mundo británico del club de golf y salones de té y setos de boj, a la
España de su tiempo, con su café de plaza y su juego de naipes y hasta un
monasterio con la correspondiente tapia. Alguna decisión es más difícil de
entender: por ejemplo, traducir «still
waters run deep», que es algo así como «la procesión va por dentro», por el
refrán «que la cabra tira al monte», que tampoco –diría– se justifica en el
contexto del poema.
En mi caso he preferido optar por el
eneasílabo, aunque manteniendo la rima del original en forma de asonancia en
los versos pares: ea en la primera
estrofa, oo en la segunda, y eo en la tercera.
Tengo entendido:lo he leido en Gil de Biedma,Diarios(1956-1985).Edición de Andreu Jaume. Ed.Lumen;que hizo una versión en romance-octasílavos con rima asonante en los pares- con el fin de entrenarse para el pasaje enumerativo de la cuarta estrofa de « Pandémica y celeste».Creo que a un poeta como era Gil de Biedma, tal y como estudió la poesía de W.H.Auden, se le pueden permitir las licencias que quiera tomarse. Por cierto: tanto los Diarios,como, Las personas del verbo, son dos libros imprescindibles.Un abrazo,Jordi.
ResponderEliminarBlanca.
Octaílabo, por supuesto, con " b". Ayer al escribir mi escueto comentario, y dado que lo hago con el teclado de un móvil, y la cercanía de la "v" y " b", tuve ese error. Gracias por la comprensión.
ResponderEliminarBlanca.
De ahí salió el título de mi libro: "Una oculta razón". Así se traducía en la versión de ese poema incluida en una separata de la revista valenciana Quervo ("Doce poemas de W. H. Auden", de Ana Gimeno Sanz), donde lo leí por primera vez, lo que tú traduces por "clave privada". Se puede leer aquí: http://www.enmitg.com/quervopoesia/separatas/15Auden.pdf. Abrazos.
ResponderEliminarGracias por el enlace,Álvaro.Un abrazo.
EliminarBlanca.
No he dicho otra cosa, África. Creo que la nota expresa mi admiración por Gil de Biedma, pero eso no significa que uno no pueda señalar, respetuosamente, algún detalle con el que disiente. Por otro lado, ninguna traducción anula la validez de otra, si es válida, claro. Cada versión corresponde a una lección distinta, una mirada distinta, y puede ser complementaria de otras. Y gracias por el aviso y el enlace, Álvaro. ¿Es posible que me lo comentaras alguna vez, o que lo leyera en una entrevista, y que me haya olvidado? Abrazo a los dos, J12
ResponderEliminarPerdón: Donde dice "lección distinta" debe decir "lectura distinta".
ResponderEliminarNi lo dudo, Jordi. Seguro que no me sabido expresar bien. Un abrazo.
ResponderEliminarBlanca.