.
.
Las cosas nunca están más vivas que cuando las ignora.
Supo que se había perdido porque ya sólo quedaba él.
No había frase de la que no saliera despedido a empellones, pero todos le ponderaban su elocuencia.
Las deudas en literatura también existen, sí, pero para completarnos.
1936: cuando los cachorros comunistas buscaban sangre "de derechas"
-
En el año 2016, conocimos, gracias al libro “Vecinos cercanos y distantes”,
de Jonathan Haslam, el espionaje soviético, a los agentes que traicionaron
al...
Hace 2 horas
3 comentarios:
http://cinepoesiajazz.blogspot.com/2009/03/9-hormigas.html
Las mías, antiguas, arañando el mismo suelo.
cierto Jordi, nada más cierto.
A empellones pequeños de diminutas migas de pan, de dimunutas virutas, de destellos de luz, escasos pero certereos, a pequeños pasos, se abren paso... las hormigas.
Publicar un comentario