viernes, diciembre 21, 2012

en luchana


Está el hombre sentado junto a la boca del metro con los ojos gachos y un cartón en su regazo: «Tengo ambre / Ayudame». Pasan dos con aire de haber tomado el café del mediodía y oigo que uno le dice al otro, con esa ronquera satisfecha tan de aquí: «Mira éste… ya se ha comido la hache».

Decía Canetti que «cuando se tiene algo que decir, ¿de qué sirve el ingenio?». Se ve que no conocía esta maña que se dan algunos para convertir el ingenio en la sal de cualquier herida.

7 comentarios:

  1. Ramón dijo en una de sus greguerías que el ambre, si es verdadera ambre, se ha comido la h.
    Un abrazo.

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  2. (Se perdió una frase):
    Ramón, obviamente, no lo decía con la crueldad de esos dos.

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  3. No se cual es peor o la indiferencia o el sarcasmo.Por eso es que el mundo està asi.Optimo post.

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  4. Es verdad, no recordaba esa greguería de Ramón. Gracias, José Luis. No descarto haber "overreacted"--abrazo, J12

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  5. No, tu indignación no fue exagerada. Era ingenio en Ramón porque era en abstracto. Fue crueldad o mezquina insensibilidad en el caso de los dos tipos.

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  6. Gracias, José Luis. Abrazo, J12

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  7. Y seguro que lo dijo para que lo oyera el del cartón y así hacer más daño.
    Cicuta en vez de café merecía haber tomado semejante tipo.
    No escarmentamos.

    Un abrazo.

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